Hace un tiempo publiqué en este mismo blog: “El color en la pintura”, donde mostraba algunas de las características y cualidades del color, manifestando la indiscutible importancia del círculo cromático.
Hoy quiero ahondar en otros puntos relevantes relacionados con el color que espero te resulten interesantes.
Dicho esto, continuo con el tema de las relaciones entre los colores que forman el círculo cromático:
ARMONÍA
Una composición armónica es aquella que emplea un abanico de colores afines. La más elemental es la monocromática, pero también se pueden utilizar más gamas de color si estas son allegadas en el círculo cromático, ya que si se abusa de la monocromía se resta fuerza expresiva a la composición y el resultado puede ser rígido y monótono.
Si usamos gamas de colores complementarios, la técnica es más difícil, pero las composiciones resultan más ricas en cromatismo, sin olvidar las relaciones y dependencias de los colores del círculo cromático.
Las armonías de color más satisfactorias son las basadas en aquellos esquemas en que se combinen colores fríos y cálidos, equilibrados emocionalmente; la excitación de los colores cálidos se compensa con el descanso y la relajación de los fríos.
TRÍOS ARMÓNICOS
Se forman por tres colores equidistantes en el círculo cromático. Si tomamos como punto de partida el amarillo-verde y trazamos un triángulo equilátero, nos dará, en sus vértices, los otros dos colores, rojo-naranja y azul-violeta, con los que formará el trío armónico.
No se deben emplear los tres primarios puros, ya que al no tener entre ellos nada en común lucharán unos contra otros. Así, el que actúe como principal puede quedar en su estado puro y ser mezclado con los dos restantes en pequeña cantidad para agrisarlos.
PENTÁGONO ARMÓNICO
Se compone de cinco colores a dos, tres, dos, tres y dos intervalos. Por ejemplo: amarillo, naranja, rojo-violeta, azul-violeta y verde, un esquema armónico con un primario, dos secundarios y dos terciarios.
Cuando interviene un solo primario, la paleta es más concentrada y armónica, mientras que, si son dos los primarios, hay una mayor variación.
COLORES FRÍOS Y CÁLIDOS
Si trazamos una vertical sobre el centro del círculo cromático, este se dividirá en dos grupos de colores con cualidades muy diferenciadas. A la derecha quedan los fríos, y a la izquierda los cálidos.
• COLORES FRÍOS
Transmiten tranquilidad, calma y seriedad. Son colores entrantes, se alejan del espectador, de nuestro sentido de percepción. Se identifican con la noche, el invierno, el mar, el bosque. El azul oscuro, el color considerado como el más frío.
• COLORES CÁLIDOS
Estimulantes, dinámicos, alegres y activos. Son colores salientes, y parecen más cerca de nosotros. Los relacionamos con el fuego, con el sol. El rojo, identificado como el color cálido por antonomasia.
Existe una ley cromática según la cual:
• Los colores cálidos avanzan; los fríos se alejan.
• Los cálidos unen y fusionan; los fríos separan y disgregan.
• Los colores cálidos aumentan el supuesto tamaño de las cosas; los fríos lo disminuyen.
Si las zonas iluminadas por la luz son frías, las sombras serán cálidas, y viceversa.
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